Como consejero de líderes empresariales, Melvin Peña es el interlocutor ideal para generar nuevas ideas, discutir las que ya se tienen o confrontarlas con la realidad.
Por puro gusto y a veces bajo demanda, Melvin invierte horas y horas en el estudio de los grandes acontecimientos y tendencias que irrumpen en el escenario global, para aprender y para enseñar.
Agudo para la conversación enriquecedora, Melvin tiene el don de hacer las preguntas que hay que hacer para resolver problemas. Creativo en la generación de insights, sabe cómo sintetizar y extraer los significados esenciales en medio de la información dispersa y voluminosa.
Su mentoría ha sido de gran apoyo y utilidad en la reinvención profesional de quienes han decidido dar un golpe de timón a su trayectoria ejecutiva.
¡Melvin es un genio! Ha sido mi coach en algunos momentos especiales de mi carrera cuando he tenido grandes desafíos profesionales y de comunicación y también ha asesorado a nuestra organización en oportunidades que han decidido su trayectoria.
Llegó como consultor al Banco Adopem en 2012, para asesorar la presentación al público de nuestra alianza estratégica con la Fundación BBVA de España y desde entonces ha sido parte de la familia, participando en el diseño de estrategias de marketing y comunicación para la bancarización y la inclusión social, como parte de proyectos auspiciados por el BID en República Dominicana o en el lanzamiento de iniciativas comerciales del mayor nivel.
También hemos contado con Melvin como excelente facilitador de talleres de capacitación y conferencista en encuentros nacionales e internacionales para entidades de financiamiento a las pequeñas y medianas empresas.
En todas estas situaciones, hemos estado altamente satisfechos con su colaboración.
— Mercedes Canalda Beras-Goico, Presidenta del Banco Adopem
A mediados de 2017, decidí que tenía que dar un giro a mi vida profesional. La manera en cómo me había posicionado hasta el momento no estaba dando los resultados esperados y eso me hizo entrar en un “trance laboral”. Melvin y yo éramos conocidos y colegas desde hacía muchos años y como conocía parcialmente su recorrido profesional, sabía que había trabajado con ejecutivos de primer nivel en diferentes sectores, y si bien él no se dedicaba al coaching ejecutivo, sino a la consultoría empresarial, pensé que podía ayudarme a revaluar los qué y los cómo de mi vida profesional. Así que le propuse que me asesorara en una reinvención profesional definitiva.
Empezamos a trabajar de adentro hacia fuera. Mel me guió en una autoevaluación que él llamaba “FODA vigorizado”, me asignó algunas lecturas, me acompañó a re-escribir mi narrativa profesional y me alentó a cambiar el marco de conversación desde mis pares hasta mis reportes directos, y me dijo: “Vamos a demostrarle al mundo que tú eres tan buena que no puedan ignorarte”. Activamos mis redes sociales de acuerdo a la nueva narrativa, cambiamos todo mi “empaque” personal, pero siempre respetando quién era yo. Parte de esos cambios implicaron la actualización de mi perfil y lo que compartía en LinkedIn, principalmente, y en las demás redes sociales. Mel monitoreaba hasta lo que me etiquetaban. También contratamos los servicios de estilismo y peluquería de profesionales, y, entonces los vientos empezaron a soplar a mi favor.
Las universidades empezaron a interesarse por mí como conferencista, una importante multinacional del sector energético casi me lleva para Colombia y el sector industrial me ofreció y acepté presidir una de las más importantes asociaciones empresariales del país.
Desde entonces Mel me llama LA PRESI y como todos estos cambios se dieron en tan solo un año, me dice que esta historia de reinvención profesional y crecimiento personal no se puede contar, porque resulta increíble: “Eso fue como aprender inglés en tres meses”. Con Mel aprendí que hay que “meterse en el personaje” hasta que este se vuelva la esencia misma de la persona.
— Bredyg Disla, Presidenta de la Asociación de Industriales de Haina y Directora de Comunicación Corporativa y Responsabilidad Social de AES Dominicana.